Dar los primeros pasos en tu negocio para emprendedores por Internet es mucho más sencillo cuando se hace de la mano de una compañía que tenga años de experiencia en el sector y una buena reputación en el mercado. Evidentemente optar por una franquicia online es una excelente posibilidad de llevar tu negocio por una baja inversión, pero hay unas obligaciones que el franquiciado deberá cumplir.
En primer lugar se tendrá que realizar el pago del canon establecido, el cual puede constar de un pago inicial y posteriormente de un porcentaje sobre las ventas y los productos que son suministrados a través del franquiciador o compañía. Evidentemente, como no puede ser de otro modo, el franquiciado deberá respetar en todo momento aquello referente a materia de imagen, precios, prestigio y calidad.
Se tendrá que aplicar el sistema comercial que sea señalado por el franquiciador. Además, el franquiciado deberá permitir aquellos controles financieros o de calidad precisos y señalados por el franquiciador. Aquella persona que monte su franquicia online tendrá que guardar secreto que todos aquellos datos e información relativa a la compañía, a los cuales se tendrá acceso con ocasión del contrato.
Única y exclusivamente se podrá hacer uso de los derechos de propiedad intelectual cedidos, los signos distintivos de la compañía o know how para la explotación de la franquicia, sin darle cualquier otro uso fuera de lugar que pueda perjudicar a la compañía. Deben respetarse todos aquellos pactos de exclusividad con la compañía. No se debe ceder a un tercero aquellas obligaciones o derechos que entren dentro del acuerdo, excepto previo consentimiento del franquiciador.
Una franquicia online es una perfecta solución para montar un negocio cómodamente desde casa, pero evidentemente como en todo hay que seguir unas normas y cumplir unas obligaciones con la empresa que nos cede su marca e imagen para evitar conflictos.
